Por
Galdino Enríquez Antonio
Gaceta
de BELÉN
El último sábado
del 2017, participé en el repaso de la Lección de la Escuela Sabática en una de
las iglesias del lugar donde crecí. El reto era sumamente interesante, ya que no
todos los asistentes saben leer y no todos los que saben leer tienen su Folleto
de Estudio. Por si fuera poco, no todos los que tienen el Folleto de Estudio
hacen del estudio diario una actividad constante en sus hogares durante la
semana. Espero que esta situación no se repita en la iglesia a la que usted
asiste, aunque la tendencia observada hasta hoy, me indica que es así.
Aunado a esto, la
lengua mater de la mayoría de los asistentes no es el español. Muchos de los
presentes se comunican cotidianamente y sólo en zapoteco, lo cual dificulta la
presentación de planteamientos acertados, esto para evitar confusiones a la
hora de que hicieran sus propias traducciones de la manera más conveniente. Un
sector de los asistentes sólo habla español, por lo tanto, una presentación
bilingüe era la más apropiada. Sin embargo, no se conciben del mismo modo los
planteamientos en español que en zapoteco, porque el contexto histórico cambia
el sentido de las palabras.
A pesar de las
vicisitudes, el reto se enfrentó haciendo uso de tres herramientas didácticas,
los cuáles deseo compartir con ustedes:
Primera
herramienta:
Una evaluación de las ideas y los conceptos
estudiados durante la semana.
En esta evaluación se utilizaron ítems de Falso y Verdadero, presentados en una
pantalla a través de un video proyector. Cada uno de los planteamientos fueron
tomados del estudio de la lección de Escuela Sabática, los cuales fueron
presentados uno a uno y eran valorados en pares, por clase o individualmente y
llegábamos a un consenso de iglesia.
Leer “Una propuesta para el REPASO de la Lecc.
de Esc. Sab.”, en: http://gacetadebelen.blogspot.mx/2017/11/una-propuesta-para-el-repaso-de-la-lecc.html
Segunda
herramienta:
Se les presentó a
los miembros de la iglesia, una seria de situaciones (estudio de casos) que enfrentan constantemente en la comunidad y
que tenían que darle una respuesta acorde a los principios estudiados en la
lección de la Escuela Sabática. Cada caso presentado dividió en más de una
ocasión a los asistentes, pero al hacerle la pregunta de qué era lo que enseñó
la lección durante la semana, eran más fácil lograr el consenso.
Tercera
herramienta:
La iglesia
mundial enfrenta situaciones a diario que ponen a prueba la actuación de los
adventistas en todo momento. En México sufre de ciertas situaciones y en cada
región del país se acentúan unas y otras ni siquiera se sabe de su existencia.
Por lo tanto, se le presentó a la iglesia circunstancias
que atraviesan cristianos en varias partes del mundo y también en México
para que definieran cual sería la actuación de ellos antes tales
circunstancias. Les costó definir una postura en las circunstancias poco
cotidiana para ellos.
Leer “¿Cómo es el repaso de la Lecc. de Esc.
Sabática en su iglesia?”, en:
http://gacetadebelen.blogspot.mx/2017/11/como-es-el-repaso-de-la-lecc-de-esc.html
El poco estudio
que realizan los miembros de esta Escuela Sabática de la lección, dificultó
enormemente la participación puntual de los presentes. Quienes no tenían idea
del contenido de la lección de la Escuela Sabática se mostraron muy legalistas;
pero quienes tuvieron la oportunidad de estudiar cada día, tuvieron respuestas
más cercanas a los planteamientos de la lección.
Tengo la
oportunidad de participar en el repaso de la lección de la Escuela Sabática de
diferentes iglesias y la tónica es la misma. El rigor académico que se le pueda
poner al repaso estará acorde al tiempo que le dediquen los miembros de iglesia
al estudio de los temas de la lección. Me he encontrado, como en el caso de
esta iglesia visitada, que muy pocos miembros asistiendo al programa de Escuela
Sabática, no todos tienen su devoción personal cada día y hasta los líderes de
grupo pequeño se preparan muy poco para presentar la lección a los miembros de
su clase.
Las tres
herramientas utilizadas en esta oportunidad, nada tenían que ver con el repaso
tradicional de mini sermón o monólogo a la hora del repaso de la lección. Los
presentes se mostraron intrigados por los planteamientos dados y con frecuencia
levantaban la mano para pedir la palabra. No dejaron que las actividades
planteadas quedaran sin concluir, decidieron seguir con cada una de ellas hasta
agotar cada uno de los planteamientos dados. El repaso de la lección se
prolongó tanto, que suspendieron el siguiente programa, porque consideraron que
era necesaria la clase y su contenido.
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