Libro: La pedagogía de Jesús
Autor: Luis Alberto del Pozo Moras
Editorial: Publicaciones Universidad
de Montemorelos
Lugar: Montemorelos, N.L., México
Año de Publicación: 2002
No. de Páginas: 120
Por Galdino Enríquez Antonio
Gaceta de BELEN
La Pedagogía
de Jesús
es un libro sobre temas educativos para
maestros de la Escuela Sabática de los ASD, y está dividida en 13
lecciones. El estudio de estas lecciones, bien podrían ser abordados durante un
trimestre, a razón de una lección por semana. Sin embargo, cada uno puede optar
por otras alternativas de trabajo para su estudio, ya sea en talleres, cursos o
seminarios.
Cada
una de las lecciones de esta obra, está dividida en dos secciones. En el
primero de estas secciones se desarrollan los conceptos e ideas centrales que
el autor del libro desea compartir con los lectores. Estas ideas y conceptos son abordados en la segunda sección de cada
lección en una aplicación homilética, que es el recurso didáctico –
literario que el autor eligió para reafirmar los conceptos planteados y las
ideas centrales que expone en cada lección.
En
la primera lección se estudia a
Jesús como el Maestros de los maestros. Tras revisar varios pasajes
bíblicos, se identifica a Jesús como un maestro de Escuela Sabática, en lugar
de un gran predicador en la Sinagoga a la que asistía. Además, en esta primera
lección, se define a la Escuela Sabática y se presentan las características que
debe tener el repaso semanal de la lección en la iglesia.
Se
indica también lo que debe hacer un maestro de la Escuela Sabática para ser
semejante a Cristo Jesús. Así mismo, se
muestra el nivel de profundidad educativa que debe alcanzar el maestro al
impartir la clase con los miembros de su grupo pequeño.
En
la segunda lección, el autor pone énfasis en lo siguiente: el estudio
del folleto de la Escuela Sabática y el
repaso de la lección cada semana, NO es un SERMÓN, sino que es una CLASE.
En esta clase, se da una exposición didáctica del tema y se tiene un diálogo
entre los miembros de la clase para el intercambio de las ideas estudiadas
durante la semana.
Una
de las primeras herramientas que tiene el maestro, es el uso correcto de las
preguntas, por lo tanto, en esta segunda lección se exponen los tres niveles de conocimiento: primer nivel –
informativo, segundo nivel – formativo y tercer nivel – transformativo. El
autor del libro hace una aplicación homilética sobre estos tres niveles de
conocimiento con el diálogo que sostuvo Jesús con Nicodemo.
Para
la lección tres, se explica un par de concepciones del proceso enseñanza
– aprendizaje, y se considera tres
aspectos para lograr el aprendizaje de los alumnos: el estímulo, la
motivación y la aplicación de un aprendizaje activo, a partir de los niveles
del conocimiento estudiados en la segunda lección. La aplicación homilética de
esta interesante lección se encuentra en el análisis de la alimentación de los
5,000 hombre con panes y peces, poniendo énfasis en el trabajo colaborativo de
los discípulos en aquella ocasión.
En
la lección número cuatro, se pone a un lado el concepto tradicional de
la educación y se concibe como el proceso de guiar el aprendizaje del alumno,
sustentando esto en la revisión de la literatura especializada en la materia.
Así mismo, se muestran una serie de
argumentaciones de lo que es y lo que no es la presentación de la lección de la
Escuela Sabática.
En
la aplicación homilética de esta lección, el autor centra su estudio en la
educación familiar que tuvo Jesús y su impacto en el desarrollo mental,
emocional, volitivo, social y espiritual, dando como resultado a un Jesús como
ejemplo de alumno y Maestro que fue y sigue siendo.
La
lección cinco presenta al alumno en sus diversas facetas, estableciendo
el autor la diferencia que hay entre el
alumno que es discípulo y el alumno que llega a ser apóstol. La aplicación
homilética en esta ocasión se basa en la obra de O. Bonhoeffer, “El costo del
discipulado” y en Mateo 19:27 – 29, a partir de los cuales se establece el
precio del discipulado, luego apóstol.
En
la lección seis se presenta la perspectiva bíblica del lenguaje, así
como la perspectiva lingüística de la lengua, partiendo de tres principales
áreas de estudio: la fonética, la semántica y la gramática. Para la aplicación
homilética, el autor se basa en Proverbios 25:11, en esta aplicación se resalta a Cristo como modelo en la forma
en que modelaba la voz y hacía uso del lenguaje, enfatizando la forma en
que Jesús enseñaba.
En
la lección siete se estudian las principales
figuras didácticas empleadas por Jesús, así como la forma en que usó el
método deductivo e inductivo, siendo este último su método predilecto. Para la
aplicación homilética, el autor revisa diversas parábolas que se encuentran
tanto en el Antiguo como en el Nuevo Testamento, dedicándole un poco más de
espacio a las parábolas registradas en Mateo 13.
Aunque
el método predilecto de Jesús era el
inductivo, en ciertos momentos utilizó el método deductivo para presentar
verdades axiomáticas, autoritativas e imperativas de Dios. En la aplicación
homilética de la lección ocho, se presentan los imperativos de Dios que
se encuentra en el Sermón del Montaña, registrado en el Evangelio de Mateo.
Humanamente, es imposible cumplir con estos imperativos divinos, pero en esta
lección, se muestra como sí se puede lograr su cumplimiento. El maestro de
Escuela Sabática debe saber distinguir los imperativos divinos de las declaraciones
humanas, y para lograrlo, se tiene que estudiar detenidamente esta lección.
En
la lección nueve se invita a la reflexión antes que a la repetición, y
se plantean las estrategias para lograrlo, destacándose el uso de las comparaciones y las preguntas de reflexión. La
aplicación homilética de esta lección se fundamenta en un par de preguntas que
Jesús le hace a sus discípulos y se encuentran registradas en Mateo 16: 13 –
17.
Los procesos
del logro educativo son tres: información, formación y transformación; y en los apuntes de la lección
diez, así como en las notas de la aplicación homilética, se describen
ampliamente el proceso y los resultados que tienen los alumnos y los maestros
de la Escuela Sabática cuando logran la fase de la transformación, después de
la memorización y reflexión de los preceptos divinos.
En
la lección once se analiza el binomio Esclavo – Libre vs. Libre –
Esclavo, donde se debate bajo qué estamos esclavizados y cuál es la dimensión
verdadera de la libertad. En la aplicación homilética de esta lección, se plantea que el maestro no solo haga de
sus alumnos buenos discípulos, sino que logre hacer de ellos apóstoles,
quienes a su vez deberán tornarse en formadores de discípulos. El autor señala
algunas estrategias que ayudarán al maestro de Escuela Sabática a alcanzar esta
meta.
Como
esta obra muestra lo que debe hacer y cómo hacer su tarea el maestro de Escuela
Sabática, no podía faltar la presentación de una clase modelo. El autor desglosa en la lección 12, tanto en
el desarrollo de la parte teórica como en la aplicación homilética, los
elementos que debe tener una clase y toma como modelo bíblico la presentación
que Jesús hizo en su clase en la montaña.
En
la última lección, el autor lleva al lector a considerar las dimensiones
de su trabajo. No solo es dar una clase.
Es motivar al alumno a identificarse con el Maestro de los maestros, es hacer
que el alumno (discípulo) sea el mensajero (apóstol) para proclamar el
evangelio a otros.
El
Dr. Del Pozo establece la diferencia entre un discípulo receptivo y un apóstol
activo. La obra el maestro de la Escuela
Sabática debe colocar al alumno en la antesala de la eternidad y el autor
dedica espacio en su obra para describir cómo será la escuela del mas allá.
Que
la lectura de esta interesante obra, ayude a cada uno a realizar mejor su tarea
de ser maestro de Escuela Sabática.